Mexico Preocupa.

 

Por La Nostalgia del Fútbol

 

La Selección Mexicana cerró su más reciente ventana de preparación rumbo al Mundial 2026 con dos partidos que dejaron más dudas que certezas. Dos noches distintas, dos ciudades distintas… pero un mismo sentimiento en la afición: preocupación, frustración y un desencanto que sigue creciendo.

 

🌙 Torreón: un empate sin alma ante Uruguay

 

El Estadio TSM Corona volvió a vestirse de verde, pero esta vez no pudo ser testigo de la alegría que tantas veces acompañó al Tri en casa. México empató 0-0 ante Uruguay en un duelo donde lo más ruidoso no fue el futbol, sino la reacción del público.

 

El ambiente, lejos de ser una fiesta, se convirtió en un termómetro perfecto para medir el ánimo del aficionado mexicano:

 

Abucheos generalizados desde los primeros minutos.

 

Gritos de “¡Fuera Aguirre!” que retumbaban cada que la pelota se movía sin peligro.

 

Y, lamentablemente, el regreso del grito homofóbico, un síntoma claro del enojo y la desesperación.

 

 

En la cancha, México mostró orden por momentos, pero muy poca creatividad. Edson Álvarez, capitán y corazón del equipo, trató de empujar a los suyos, pero ni Lozano ni Raúl Jiménez lograron generar la chispa ofensiva.

El Tri lució tímido, predecible y sin ideas, mientras Uruguay manejó el partido a ritmo de entrenamiento.

 

El empate a cero no fue sólo un marcador: fue un reflejo de un equipo desconectado de su gente.

 

🌙 San Antonio: otra herida, esta vez ante Paraguay

 

Tres días después, México viajó a San Antonio con la misión de mejorar su imagen. Pero el resultado terminó por hundir todavía más la discusión: derrota 2-1 ante Paraguay, con errores que se repiten una y otra vez como un mal déjà vu.

 

Los goles paraguayos llegaron por lo mismo que ha sido un dolor de cabeza en toda esta etapa:

 

 balón parado y desconcentración defensiva.

 

Al 51’, Sanabria aprovechó la pasividad en la marca.

 

Al 56’, Bobadilla prendió el segundo mientras la defensa mexicana observaba más de lo que reaccionaba.

 

 

Raúl Jiménez descontó al 54’, pero su gol terminó siendo apenas una anécdota en otra noche amarga.

 

A pesar de los ajustes, cambios en la alineación y rotaciones en portería, México volvió a evidenciar falta de cohesión, errores infantiles en defensa y una preocupante ausencia de liderazgo en momentos clave.

 

 

💭 Una afición que ya no compra discursos

 

Lo vivido en Torreón y en San Antonio dejó claro que el problema no es sólo futbolístico, sino emocional.

La afición mexicana se cansó de promesas, de experimentos y de un proyecto que aún no logra caminar firme rumbo al 2026, el Mundial que México jugará en casa.

 

Los abucheos, los gritos, las expresiones de frustración… no son un capricho:

son la voz de millones que sienten que este Tri no los representa en la cancha.

 

 

🕰️ En La Nostalgia del Fútbol

 

Recordamos cuando la selección ilusionaba, cuando cada partido era una cita especial, cuando México defendía su camiseta con orden y carácter.

Hoy, esas noches parecen lejanas.

 

Pero el fútbol, como la vida, siempre da revanchas.

Aguirre y sus jugadores tienen muy claro que estas no son amistosos cualquiera: son alertas.

Luces rojas que piden respuestas inmediatas.

 

México necesita reencontrarse… no sólo con el gol, sino con su gente.